Es bien sabido que todas las organizaciones deben estar a la par con la tecnología. Esto significa, estar aliado con herramientas que ayuden a la optimización y productividad de los procesos, como también al ahorro en costos de TI. Es allí, donde las herramientas Cloud brillan por su eficacia y economía.
Sin embargo, algunas de las empresas desconocen los beneficios del software en la nube, y recurren a guardar la información en los servidores físicos (On-premise).
Este último, se convierte en una opción arriesgada, al desconocer con certeza cuánta inversión habrá que hacer a medida que se compliquen las cosas.
Puesto que, la propia organización debe disponer de un espacio para instalar los servidores y con ello necesita tener un equipo propio que realicen labores de mantenimientos que demanda el servidor. Generando más costo y responsabilidades innecesarias al área de TI.
Por otra parte, por muy grande que sea la inversión en seguridad física, difícilmente podrá controlar riesgos cómo fallo en sus servidores, robos, destrozos, incendios o fenómenos naturales que afecten la integridad de la información.
Asimismo, la seguridad cibernética puede llegar a ser vulnerada por estar conectada a la propia red de la compañía. Generando incertidumbre, ya que los datos pueden recibir un ataque dejando a la empresa como en los tiempos de piedra.
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¡Tranquilo, estás a tiempo de pasarte a la nube!
La modalidad Cloud, es la recomendada no sólo por nosotros, también por los clientes y empresas que ya tienen toda su información en la nube.
Los proveedores de infraestructura Cloud, están diseñados para minimizar fallos, sistemas antiincendios y equipos de vigilancia para prevenir y disuadir robos.
En esos lugares, se cuentan con equipos expertos altamente especializados y capacitados en el mantenimiento de esos grandes entornos, donde el coste de ese servicio es algo mínimo y va incluido en la cuota mensual del servidor Cloud.
En conclusión, aunque aún existen empresas que manejan el sistema On-premise, estos pueden estar más propensos a daños y alteraciones físicas dentro de la organización, mientras que con el sistema Cloud, pueden estar más protegidas y seguras, evitando costes elevados en infraestructura y soporte técnico.